Nuestro compatriota Ángel Guillén prendió una vela de esperanza para un brazalete WSOP con tonalidades tricolor. Entraba bien posicionado en cuarto lugar a la mesa final del Evento #35: $10.000 Secret Bounty No-Limit Hold´em en donde tenía que enfrentarse a una mesa un tanto complicada: Chris Klodnicki lideraba con poco más de seis millones y ya contaba con un brazalete WSOP. Por otro lado, más experimentado aún, Jeremy Ausmus, buscaba su sexto brazalete y llegaba con un muy buen stack a esta instancia.
Guillén había recibido un duro golpe, cuando tras un periodo de estar sin recibir buenas cartas y sin poder hacer mucho, con blinds 150.000/300.000 y BB Ante 300.000 se enfrentó a una apertura de Klodnicki a 1.325.000. Ángel, que veía A♦️ 10♣️ y tras una breve consideración, empujaba todo al centro. Cubría a su oponente y era un pozo decisivo para el mexicano, sin embargo, no lo encaraba en la mejor forma ya que iba fuertemente dominado.
Chris: 10♠️ 10♦️
Ángel: A♦️ 10♣️
Las comunitarias fueron 4♣️ Q♦️ 10♥️ 5♣️ 3♠️ y el flop ya era fulminante para el mexicano, que necesitaba dos ases consecutivos para poder ganar ese pozo de 5.100.000, lo que le dejaba solo un 2% de probabilidad.
Guillén aguantaría con solo 1.600.000 (5 BB´s) hasta que recibió 9♠️ 9♦️ en HJ, suficientes para ir «all-in». Se topó con Barak Wisbrod en la ciega pequeña con A♦️ K♣️, y también se iba con todo por 4.250.000, mientras que Jeremy Ausmus, en la ciega grande, también veía A♣️ K♥️ y siendo el amplio chip leader, no dudaba en pagar.
Ahora si estaba en buena forma para triplicarse, pues sus dos rivales chocaban outs entre ellos, por lo que sus nueves podían aguantar muy bien. Como amplio favorito, Guillén tenía un 65% a su favor:
El dealer sacó el flop 8♦️ J♥️ 10♣️ , bueno para el mexicano que le mantenía su porcentaje a favor.
El turn 3♦️ fue excelente y mejoraba a 80% las posibilidades de Ángel de ganar ese buen pozo con 5.100.000.
El river fue fatídico ya que mostraba el A♥️ dejando fuera a nuestro protagonista y dividiendo sus fichas entre sus dos oponentes.
Por su buena actuación, Ángel quedaba cerca, a solo unos pasos de poder reclamar un brazalete WSOP que tendría fuertes tonalidades tricolor, pero así es el poker y para ganar, muchas cosas tienen que salir bien de manera consecutiva. Además, un nada despreciable cobro por US$127.515 no suena para nada a derrota. ¡Muchas felicidades por el mérito correspondiente! No cualquier jugador puede presumir jugar una mesa final en la World Series of Poker.
Sobresaliente el apoyo de la armada mexicana que estuvo ahí presente con él, incluyendo a su novia Lynn Gilmartin, vimos la presencia de sus amigos Santiago González, Mauro Ávila, Andrés Campero y Pedro Laguerenne quienes a gritos pedían ese nueve que prácticamente le aseguraría la mano.
Información de Wsop.com e imágenes de PokerGo.
